Competencias de los docentes del Siglo XXI

Con cada etapa que ha llegado al mundo, el rol del docente ha tenido cambios y transformaciones trascendentales en los cuales ha tenido que adaptar su práctica educativa para ir al compás del mundo globalizado; y por esto, en el siglo XXI, son aún más las exigencias y retos que se le plantean al docente, lo que requiere que adquiera nuevas habilidades para poder llevar a cabo sus tareas.

Según lo anterior, se describen algunas de las competencias que deben tener los docentes del siglo XXI:

1. Ser creativo e innovador, es esencial que el docente conozca y sepa utilizar las TIC para que se apropie de ellas, asimismo que esté abierto a nuevas ideas y posibilidades para que, finalmente las pueda aplicar en el aula de clases. De igual manera, es fundamental que el docente sepa transmitir todos sus conocimientos y por qué no hacerlo mediante estos recursos tecnológicos para facilitar este proceso y así mismo descubrir nuevas formas de enseñanza y aprendizaje.
2. Como es de saber, cada estudiante es un mundo diferente, y manejan procesos de aprendizaje totalmente diferentes, es por esto que el docente debe partir de los conocimientos previos de los alumnos y sobre estos, pensar en estrategias para ambientar y contextualizar las instrucciones que se vayan a dar a cada estudiante, basándose en una excelente comunicación, para hacerlo así partícipe de su propio aprendizaje.
3. Gracias a las nuevas tecnologías se pueden “globalizar” las clases, y así, para explicar o profundizar en alguna temática en específico como geografía, ciencias naturales y demás, podrán tener acceso a algún nativo que desee hablar sobre su cultura, ver videos, documentales, o ayudarse de los mapas de google earth para que puedan ver el  sitio como si realmente estuvieran allá, y no simplemente dirigirse a un libro de historia, que aunque es de gran utilidad, pueda que no sea tan llamativo para el estudiante.
4. Mediante un MOOC, Moodle, Wikis y demás, el docente podrá animar a los estudiantes a que suban documentos y tareas, compartan opiniones e incluso debatan, para no quedarse simplemente con los recursos primarios.
5. Finalmente, el docente debe tener pensamiento crítico y también fomentar inquietudes, para que pueda identificar cuáles son las preguntas que tienen los estudiantes o del mismo modo plantearlas para destacar algunos puntos de vista, aclarar dudas y proponer soluciones.