¿Se es demasiado viejo para aprender inglés?

Llegar a una mayoría de edad y haber sobrepasado los años de juventud no es pretexto ni impedimento para aprender una segunda lengua, ya sea inglés, francés, italiano, etc. No obstante, esos son, justamente, algunos de los motivos por los que la mayoría de personas se alejan de lograr esta meta.

De acuerdo con Benny Lewis, un políglota que aprendió su segunda lengua cuando tenía 21 años, las personas no se esfuerzan por aprender otro idioma simplemente por creer que es demasiado tarde. “Una de las grandes barreras es pensar que no se tienen suficientes habilidades. Cuando pensaba que no era bueno en el colegio para los idiomas, no estudiaba y, como era natural, me iba mal en los exámenes”, señala Lewis.

Lewis, después de viajar por 11 años alrededor del mundo y aprender cerca de 10 idiomas, recogió sus vivencias en el libro ‘Fluidez en tres meses’, un éxito editorial en el que, conjuntamente, incluye consejos para aventurarse a instruirse en otras lenguas.

Según el texto, la primera recomendación, es dejar de idealizar que una persona con conocimiento en otras lenguas no tuvo que esforzarse. Lewis descubrió que aquellos que tuvieron éxito aprendiendo otro idioma, lo hicieron gracias a que superaron un sinnúmero de dificultades. “La segunda, es que no hay que temer al cometer errores: es natural dentro del proceso de aprendizaje. La diferencia con los niños es que pueden hablar, equivocarse, jugar y vivir en el idioma. En cambio, los adultos suelen concentrarse en libros de gramática porque consideran que aprender una lengua es como presentar un examen que, por cada error, se pierden puntos hasta reprobar”, añade Semana Educación.

La tercera estrategia recae en la creación de bloques de aprendizaje en el que los conocimientos de vocabulario o gramática no queden aislados, sino que, por el contrario, se les dé sentido en un contexto más amplio. Al final, y después de haber entendido la razón, es importante que cada persona se autoevalúe: crear preguntas y tratar de responderlas para darse cuenta si realmente se consolidó el aprendizaje.