Enseñanza y conciencia. El compromiso social en el trabajo docente (1930-1943)

El compromiso con las necesidades sociales del medio, como parte constitutiva del rol docente, fue asumido por la Asociación de Maestros de La Pampa, institución que reflejó la conciencia media del magisterio pampeano acerca del "deber ser" de su trabajo.

Para ejercitar este y postulados tales como la defensa de la escuela pública y el laicismo, enfrentó un clima ideológico adverso. Tal clima - y sus prácticas represivas a cargo del Consejo Nacional de Educación - podría identificarse a grandes rasgos con el apogeo del nacionalismo restaurador emergente en el golpe militar de 1930 y su continuidad en el nacionalismo católico que acompañó el golpe militar de 1943.

Entre ambos sucesos, la confrontación CNE-AMP es analizada desde casos emblemáticos, sobre los que pueden tenderse "puentes" intelectuales que enlacen hechos del pasado entre sí y con el presente, todo ello desde un universo ideológico que se identifica con la fertilidad dialéctica del conflicto.

El compromiso con las necesidades sociales del medio como parte constitutiva de la práctica docente, fue asumido por la Asociación de Maestros de La Pampa (AMP) desde su nacimiento en 1928.

En la aplicación de ese y otro de sus postulados, la defensa de la escuela pública debió enfrentar un clima ideológico adverso, desde su misma génesis, y durante los años siguientes. Tal clima podría identificarse, a grandes rasgos, con el apogeo del nacionalismo restaurador durante los años previos y posteriores al golpe militar del 6 de setiembre de 1930, y su posterior fusión con el tradicionalismo católico, continuidad que tuvo su instancia clave en el golpe militar del 4 de junio de 1943.

Este proceso se vio reflejado en la integración y prácticas del Consejo Nacional de Educación (CNE). Somos conscientes de la polisemia del término "nacionalismo" y de que el calificativo "restaurador" también es susceptible de ser interpretado en más de un sentido. Pese a ello, mantenemos la figura de "restauración" para referimos a climas opresivos de un pasado colonial hispanizante, que debían restablecerse con afán disciplinador, y que sobrevolaron la conflictividad de esa etapa en el piano de la cultura y la educación, es decir la Gestalt del trabajo docente.

Presentadas ambas instituciones, AMP y CNE, podemos afirmar que la práctica docente, en tanto social, es histórica, es decir que tiene un origen y un devenir a través del cual se fue configurando, y en tanto historia colectiva de un grupo, cada sujeto se convierte en su portador (Alliaud, 1998:87).

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