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Palabras de Pedro Gómez Barrero en la Ceremonia del Premio Compartir

Educar es la misión más importante de la humanidad y junto con la paz y la equidad son los compromisos trascendentes de nuestra Nación.

Mayo 19, 2015

Educar es la misión más importante de la humanidad y junto con la paz y la equidad son los compromisos trascendentes de nuestra Nación. Por eso nos reunimos hoy, como lo hacemos desde hace 17 años, para rendir homenaje a los mejores educadores de Colombia.

Son 6 rectores y 19 maestros a quienes tributamos nuestro reconocimiento por la excelencia de su docencia desempeñada con disciplina, nobleza e inteligencia por todas las veredas, las poblaciones y las ciudades de nuestro país.

Estimados rectores y maestros: escogimos este hermoso escenario para presentarles nuestro respeto y ofrecerles nuestro apoyo a fin de que entre todos construyamos una Colombia más desarrollada y equitativa. Este es el objetivo del Premio Compartir que se fortalece cada año con el apoyo de todos ustedes, estimados amigos. Gracias por acompañarnos; gracias por creer en nuestro trabajo y por hacer suyo nuestro compromiso total con la educación.

“…rectores y maestros: escogimos este hermoso escenario para presentarles nuestro respeto y ofrecerles nuestro apoyo a fin de que entre todos construyamos una Colombia más desarrollada y equitativa”

Gracias también a las otras Fundaciones y entidades que generosamente trabajan con nosotros en las diversas ciudades y regiones.

El sueño que inspiró nuestra Fundación hace 35 años, se consolidó en 1998 con la creación del Premio Compartir al Maestro, se amplió en 2008 con el inicio de la regionalización y se hizo más grande en 2012 con el Premio al Rector. El camino recorrido nos acerca cada vez más a los maestros y rectores y nos permite exaltar su labor.

Estamos orgullosos de hacer lo que hacemos y de convocar al país alrededor del tema educativo. Pero el trabajo no lo hemos hecho solos. Hemos contado con el apoyo decidido de expertos en educación, autoridades nacionales y locales, medios de comunicación, empresarios, fundaciones e instituciones de educación superior. Con ellos desarrollamos cada año las cuatro etapas que conforman el Premio: promoción ante los más de 400 mil rectores y maestros, evaluación de las postulaciones, selección de las mejores propuestas y premiación de los ganadores.

“Mucho hemos logrado pero largo es el camino aún… Estamos convencidos que mientras sigamos con el nivel de calidad educativa que tenemos actualmente, Colombia seguirá condenada a la pobreza y a la inequidad.”

El trabajo del Premio Compartir no se detiene;  hoy asistimos a la culminación de un ciclo anual. Para llegar a la premiación promocionamos el premio de manera directa ante cerca de 14 mil educadores, evaluamos 1.346 postulaciones provenientes de todo el país, visitamos 76 instituciones en 20 departamentos y región por región en Atlántico, Bolívar, Boyacá, Cundinamarca, Santander y Valle de Cauca destacamos la labor de 12 maestros y 8 rectores. 11 de ellos hacen parte de este grupo ganador integrado por los 25 mejores educadores del país.

Esta ceremonia es para ustedes rectores y maestros pero también para todos sus colegas a quienes invitamos a recorrer el camino que ustedes están culminando. Sabemos que reconocer públicamente a los mejores y otorgarles premios significativos en especie, en dinero y en oportunidades de formación, tiene impacto directo en su calidad y, por lo tanto, en la calidad educativa del país.  Un rector y un maestro excelente que es homenajeado por serlo, no saldrá fácilmente de esa espiral de calidad, motivará  el mejoramiento de la práctica pedagógica de algunos de sus colegas y logrará potenciar aún más a sus estudiantes.

Las ceremonias de premiación que organizamos a nivel nacional y en provincia con nuestros aliados, son el inicio de una nueva etapa en la vida laboral y personal de los homenajeados. A partir de esos reconocimientos ellos no serán los mismos y tampoco lo serán sus estudiantes, sus instituciones educativas, sus comunidades ni sus familias.

El Premio no solo es un acto de fe. Tenemos evidencia técnicamente sustentada que comprueba que ser galardonado por el Premio Compartir impacta positivamente la calidad educativa.

Sabemos también que las 26 mil propuestas que hemos recibido a lo largo de la vida del Premio han motivado el mejoramiento de  16 mil de los maestros que las han postulado. Todos ellos,  para inscribirse al Premio, han realizado antes un ejercicio de reflexión sobre su tarea. Este ejercicio es ya, de por si, una inmersión en un proceso de mejoramiento que se ve impulsado por la retroalimentación que recibe cada postulante y por la visita que algunos de ellos reciben de los evaluadores y el equipo del Premio Compartir. 

El Premio contribuye también al mejoramiento de la calidad educativa con la amplia socialización que hace de las prácticas de los ganadores. Esta socialización se inicia con la presentación que cada uno de los finalistas realiza ante el gran jurado y sus colegas; continua con las publicaciones físicas y digitales que la Fundación hace de las diferentes experiencias. Adicionalmente, los ganadores nos acompañan a motivar a otros educadores y las miles de postulaciones al Premio son la base de estudios e investigaciones que caracterizan las tendencias pedagógicas en las diferentes áreas del conocimiento.

Nos enorgullece haber sido, no solo testigos, sino también artífices, de la profesionalización de la carrera docente. Colombia ha dejado atrás esos días donde los profesores eran solo personas entusiastas y con vocación de servicio. Hoy,  gracias al trabajo de muchos colombianos, contamos con educadores cuya concepción de su trabajo y de si mismos, ha cambiado positivamente y se ha ajustado a las necesidades de la sociedad del siglo XXI.

Y así como maestros y rectores se adaptan a las constantes innovaciones de la sociedad del conocimiento, la Fundación Compartir actualiza su forma de comunicarse. Es por esto, que las publicaciones tradicionales del Premio Compartir y los mecanismos de comunicación que teníamos con la comunidad educativa se han transformado en un portal donde el conocimiento se construye de manera horizontal y el diálogo con la comunidad educativa es permanente. Hasta el año pasado distribuimos tres veces al año 38.000 ejemplares del periódico Palabra Maestra y dos veces al año 6.000 del de  Pensamiento Rector. Hoy, gracias a nuestro Portal Compartir Palabra Maestra que tiene tan solo tres meses de vida, mantenemos contacto diario con 700 visitantes y publicamos en promedio, 140 contenidos educativos mensuales.

Son grandes los retos que nos impone nuestro propósito de seguir contribuyendo con el cambio que necesita el país. Mucho hemos logrado pero largo es el camino aún. Seguiremos trabajando por la educación bajo las orientaciones del gobierno. Estamos convencidos que mientras sigamos con el nivel de calidad educativa que tenemos actualmente, Colombia seguirá condenada a la pobreza y a la inequidad. 

Señor Presidente, señora Ministra de Educación: conocemos y celebramos los programas que actualmente están desarrollando, que contribuirán a mejorar la calidad de la educación y con el tiempo lograrán que la docente sea una de las mejores carreras profesionales.

Muchos docentes han mejorado su remuneración; el primer paso está dado hacia la reforma educativa integral y sistémica que necesita el país.

Tenemos buenas razones para confiar en que el Presidente Santos, a pesar de las restricciones fiscales, sentará las bases y armará las estructuras institucionales para que Colombia logre ser la nación más educada de América Latina.

Se podría lograr que los mejores bachilleres estudien educación y se formen en facultades de la más alta calidad; así mismo, se podría ofrecer a los docentes un esquema de evaluación y de formación en servicio que les permita mantenerse en una espiral de mejoramiento continuo.

Y para continuar con nuestro homenaje quiero reiterar las características que hacen a estos  19 maestros y 6 rectores merecedores del Premio Compartir.

Los docentes dominan la disciplina que enseñan y saben cómo lograr que sus estudiantes, todos con necesidades y realidades diferentes, se interesen, se entusiasmen, se esfuercen y adquieran las competencias que la Colombia del siglo XXI les exige. Son maestros que además de mantenerse actualizados en el área que enseñan y en temas pedagógicos, saben interactuar con sus alumnos y las familias de cada uno de ellos, con sus colegas, con sus superiores, y con toda la comunidad que los rodea. Son personas capaces de analizar, evaluar y reflexionar sobre su práctica pedagógica y logran que todos sus estudiantes, independientemente de sus condiciones y características personales, aprendan.

Por su parte, los rectores finalistas son verdaderos líderes que logran establecer en sus instituciones educativas un ambiente de convivencia donde todos los recursos físicos, financieros y académicos están puestos al servicio del aprendizaje de sus alumnos.  Con una visión muy clara de lo que es ser educador y de la responsabilidad que tienen con sus profesores, alumnos, padres de familia y comunidad que rodea el colegio, estos líderes planean y ejecutan minuciosamente un modelo de gestión administrativa y pedagógica que promueve el mejoramiento continuo de sus docentes, ofrece educación de calidad a todos los estudiantes y se convierten en elementos clave para el desarrollo de su entorno. Estos rectores reconocen las necesidades  de su comunidad, planean con ella y trabajan para ella.

 A los educadores, congratulaciones; a ustedes, apreciados amigos, gracias y a Colombia, la reiteración de nuestro compromiso con la educación.

 

Pedro Gómez
Teatro Colón
Bogotá, D. C. miércoles 13 de mayo de 2015

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Irma María Arévalo González
Gran Maestro Premio Compartir 2002
Ofrezco a cada uno de los alumnos un lápiz mágico y los invito a escribir su propia historia enmarcada en los cuentos y leyendas de su cultura indígena.