Cinco maneras de enseñar y aprender los números decimales

Hay muchas formas de enseñar y aprender los números decimales. Si los estudiantes quieren apropiarse de la información y saber cómo representar las unidades, las décimas y las centésimas adecuadamente es necesario hacerlo por medio de la enseñanza óptima que imparten los educadores en las diferentes lecciones en las aulas de clase.

Es recomendable, entonces, utilizar una o varias de las actividades que se mostrarán y explicarán a continuación.

1. El docente debe preguntarle a sus alumnos ¿qué saben sobre los números decimales? Preguntarles si saben escribir y leer los decimales. Pedirles que formen una pareja y busquen información sobre estos a través de la lectura y la escritura, ya sea en línea o en libros físicos. Es el deber del educador buscar actividades divertidas para repasar los números decimales pero antes, debe sentarse junto a cada equipo y pedirles que le hablen sobre lo que han logrado descubrir a través de su búsqueda.
2. Todo proceso de aprendizaje requiere una fase en la que se ha de destinar tiempo para repasar lo aprendido. Así pues, el docente debe destinar tiempo a corroborar la información asimilada y la que no lo fue. Es recomendable que los docentes realicen un examen sin calificación y revisen los resultados obtenidos antes de hacer la retroalimentación para todo el curso. Una vez estén las pruebas corregidas, es necesario hacer énfasis en los errores cometidos y solucionar las dudas más comunes que tengan sus alumnos.
3. Crear un documento de texto y añadir las respuestas en la página final a cada una de los ejercicios planteados, es una de las ideas más útiles. Una vez finalizado el documento, este puede ser subido y compartido con los estudiantes o en caso de que no se deseen utilizar recursos electrónicos, este documento puede ser impreso y entregado a cada alumno. La actividad permitirá reforzar el conocimiento inicial de los alumnos sobre el tema sin hacer que estos experimenten la presión de un ejercicio con mala calificación ayudando a que se desarrollen sus capacidades analíticas en un espacio para trabajar en equipo y para captar la información. Si en algún momento del proceso tienen dudas podrán revisar la parte final de los ejercicios y rectificar dónde hubo errores, si llegase a haberlos.
4. Crear juegos grupales es una estrategia fantástica. Se deben colocar los alumnos en grupos de cuatro creando dos equipos porque ¡van a jugar al tres en raya! Los estudiantes tienen que realizar los cálculos mentales con decimales para poder colocar la equis o el círculo. La competición no termina hasta que uno de los dos equipos gane tres partidas seguidas. Cuando haya un equipo vencedor, el docente irá seleccionando otros vencedores y competirán por el primer lugar.
5. Diseñar una tienda donde se vendan los productos favoritos de los estudiantes es un método eficiente que no da espacio a la carencia de motivación debido a que se sentirán en un juego de rol, alguien vende y alguien compra. Los estudiantes pueden jugar llevando juguetes, frutas, dulces, objetos de papelería o ropa, sin dejar de lado la obligatoria necesidad de dinero didáctico. Quien hace el rol de vendedor debe encargarse de sumar y restar adecuadamente el dinero recibido y el comprador debe revisar si fue correctamente atendido.