La experiencia de leer y escribir

Para empezar, es importante contextualizar un poco acerca de quién es Rudy Esperanza Arias, ella es docente galardonada por la Fundación Compartir en la Institución Educativa Distrital Carlos Arturo Torres, ubicada en el barrio las Delicias en la ciudad de Bogotá.

Actualmente, es docente de básica primaria. Es importante traer a colación que, esta profesora se ha focalizado en que los niños de grado primero de primaria logren reconocer y construir sus conocimientos desde la comunicación real y afectiva y que a partir de esto los niños aprendan a leer y a escribir.

Para el desarrollo de este propósito, Rudy ha implementado y promovido una estrategia bastante dinámica y enriquecedora que se trata de "abrir el aula" es decir, este espacio no solamente es para los niños que pertenecen a la institución sino, abre el aula para que los padres de familia y los miembros de la comunidad académica también hagan parte de este proceso como los niños.

El objetivo de este es, primeramente, generar un desarrollo autónomo del niño, en segunda medida, busca que los niños se reafirmen como interlocutores válidos en  la sociedad y por último generar conciencia y afinidad para llevar a cabo en los procesos de lectura y escritura puesto que leer ayuda al niño a construir un significado con base a su contexto social y escribir, genera un pensamiento crítico y autónomo. Procesos que son bastante significativos para el desarrollo de un niño.

“Escribir es necesario para aprender a escribir, pero no es suficiente. Las actividades de leer y escribir consisten en participar en la comunicación verbal humana. Para aprender a leer y a escribir, los alumnos tienen que participar en actividades diversas de lectura y escritura, con finalidades, interlocutores y ámbitos de interacción diversos.

Pero para aprender la complejidad de los usos escritos, tiene que haber actividades de enseñanza y aprendizaje que prevean que hay conocimientos específicos relacionados con las particularidades de los géneros escritos que habrá que enseñar para que puedan ser aprendidos. Mirado desde la otra perspectiva, también habría que decir que las actividades de enseñanza por sí mismas, sin ofrecer a los alumnos oportunidades para escribir en situaciones diferentes, no serían suficientes para aprender a escribir textos que deben responder a la complejidad de los contextos interactivos. Se plantea, pues, la necesidad de relacionar la práctica con la reflexión” (Camps, 2000).

Con respecto a la cita mencionada, la profesora Rudy se apoya en teorías como la de Ana Camps y se evidencia en su clase puesto que, le brinda una mirada más amplia de como favorecer los procesos de construcción del conocimiento de los estudiantes planeando una secuencia didáctica.

En lo que pude evidenciar, ella se basa en situaciones en las que los niños vivan prácticas de lectura y escritura ligadas al contexto social en el que se encuentran y de este modo el niño va trabajando su oralidad, su lectura y escritura de manera autónoma; es importante ver que esta vinculación de saberes logra dar un mayor interés por parte de ellos.

Es importante recalcar que, los niños no solo trabajan individualmente sino que ella también logra que ellos trabajen en equipo en el que puedan debatir, presentar sus puntos de vista, sus intereses y los puntos de los que no están de acuerdo.

Los niños presentan una precoz representación del lenguaje que se escribe y de las diferencias entre el lenguaje de conversación y el lenguaje escrito: éste es el que seleccionan para sus textos. Así también tienen una tendencia a organizar la presentación gráfica del texto. En un primer momento lo que se delimita son las fronteras exteriores: un comienzo y un final indican los límites del texto.

Luego van introduciendo la delimitación de espacios internos (Teberosky, 1994; Ferreiro, Pontecorvo, Ribeiro y García Hidalgo, 1996). Con base en esta cita, la profesora Rudy guía el aprendizaje del niño puesto que identifica el nivel de construcción cognitivo, a su vez reflexiona acerca de lo que los niños realizan con respecto a la escritura y el funcionamiento de la lengua. Es por esta razón que la profesora se  apoya en estas teorías.

Para terminar, la profesora Rudy, ha elaborado un excelente trabajo y a su vez muy enriquecedor para los niños ya que han vivido este proceso de lectura y escritura separadas de la técnica y ligados  a las prácticas socioculturales que es la lectura como experiencia, desarrollando procesos de escritura y oralidad muestran su pensamiento puesto que cada construcción de estas tiene su intención.

Asimismo, se construye un espacio equitativo ya que, hay una interacción grupal, no hay discriminación y lo más importante, los niños avanzan según su propio proceso de manera libre, espontánea y enriquecedora.

Referencias

Anna Camps . (2003). Lectura y vida. Revista Latinoamericana de lectura, 4, 11.

Ferreiro, E., & Teberosky, A. (1991). Los sistemas de escritura en el desarrollo del niño. Siglo XXI.