La participación de las mujeres en sectores relacionados con las ciencias y la tecnología, sectores privilegiados en el futuro, es todavía minoritaria.
Ya comienza a oírse cada vez más el término STEM en muchos ámbitos, sobre todo académicos. Pero también de gobierno, económicos, técnicos y en el campo de las ciencias humanas.
Diseñando artefactos para resolver problemas de la vida cotidiana los estudiantes desarrollan su creatividad, su pensamiento tecnológico y aprenden el valor del trabajo en equipo.