Usted está aquí

Así se construyó la primera biblioteca público – escolar de Sumapaz, en Bogotá

En el páramo se respira hoy aire fresco y cultura gracias a un esfuerzo conjunto entre la comunidad y el gobierno distrital. 

Agosto 25, 2017

A cuatro horas del centro de Bogotá, en medio de un verde exuberante y un frío intenso, se levanta reluciente la biblioteca público – escolar de Sumapaz, la primera en toda la zona de páramo. Un espacio que se construyó, ladrillo a ladrillo, libro a libro, gracias al Plan Distrital de la Lectura y Escritura ‘Leer es Volar’ y la ayuda de la comunidad, tomando en cuenta sus necesidades puntuales, sus perspectivas en materia de lectura, cultura y sus sueños y anhelos para mejorar su región.

“Yo ayudé a los ingenieros con la estructura y con los diseños, eso hace que esta biblioteca sea muy especial para nosotros los habitantes del páramo, porque la construimos con nuestras manos, pensando en el futuro de nuestros hijos, que lean para que tengan mejor educación y mejores oportunidades”, comenta orgulloso Cecilio Romero, maestro de obra y habitante de la vereda La Unión.

Y si de algo están convencidos en el páramo, es que esta biblioteca es la muestra viva de todo lo que se logra cuando comunidad y las instituciones de la ciudad unen fuerzas. Esta particularidad hace que esta obra pública tenga una connotación completamente distinta y sea percibida por los habitantes del lugar, no como un ‘regalo’ de las autoridades distritales para la localidad, sino como un logro de todos y para todos.

Por eso, orgullo, sentido de pertenencia, una oportunidad para crecer y mejorar, son algunas de las frases que los habitantes de la zona utilizan para sintetizar lo que esta biblioteca significa.

“Estamos muy contentos con nuestra nueva biblioteca. La estábamos necesitando mucho porque los niños de la vereda, cuando salen del colegio, no tienen mucho qué hacer. Sólo jugar fútbol o ver televisión. Ahora con la biblioteca nueva se les va a poder inculcar a los chicos el amor por la lectura”, dice Doris Romero, vecina de la vereda La Unión y una convencida del poder que tiene la educación para traer desarrollo y prosperidad a las regiones.

Cecilio, Doris, los 5.700 habitantes de La Unión, Tunal Alto, Tunal Bajo, Santo Domingo y aledañas (según el último censo oficial) y los estudiantes de los colegios Juan de la Cruz Varela y Jaime Garzón hoy disfrutan de una amplia colección de material pedagógico con 2.600 ejemplares para niños, jóvenes y adultos y abundante en temas seleccionados específicamente desde las necesidades de la comunidad: agricultura, emprendimiento, historia de la región, entre otros.

Además, un centro de informática para ‘conectar’ a todos en el páramo, salas de lectura infantil y familiar, el servicio de cajas viajeras de lectura, promoción de lectura y escritura para niños, jóvenes y adultos, y de alfabetización digital y conectividad a internet para la comunidad.

Un espacio para la cultura, la recreación y el encuentro

Aunque el Páramo de Sumapaz es abundante en parajes naturales y santuarios verdes, cuenta con pocos espacios para el encuentro de la comunidad.

Por esta razón, la puesta en marcha de la biblioteca pública – escolar representa una valiosa oportunidad para ampliar las opciones de recreación y esparcimiento para los residentes de la zona, al mismo tiempo que permite a los estudiantes acceder a fuentes de información y material didáctico que les sirva de apoyo en sus procesos pedagógicos. Una apuesta con doble beneficio.

Así lo destaca Trina Esperanza Pacheco, rectora del Gimnasio del Campo Juan de la Cruz Varela, colegio que alberga a la biblioteca, para quien este espacio “permite que la institución se consolide como el espacio de encuentro para la comunidad, que vengan aquí no solo los estudiantes, sino las familias a leer con sus hijos, y para que los adultos y las personas de la tercera edad puedan consultar temas de su interés y congregarse alrededor de la cultura y los libros”.

Un espacio ameno para leer, para ampliar el conocimiento y dejar ‘volar’ la imaginación, es lo que gana la localidad con la nueva biblioteca; un espacio que sirve no solo para fortalecer las habilidades de los estudiantes, sino para que la comunidad comparta, intercambie saberes y se encuentre alrededor de la cultura.

“A mí me gusta mucho leer, me gustan los cuentos de Tin Tín y los poemas de Rafael Pombo. Estoy muy contento con la biblioteca porque voy a poder ir a leer y a meterme a internet para hacer las tareas cuando salga del colegio”, dice por su parte Dylan Cubillos, estudiante del colegio Juan de la Cruz Varela y residente de La Unión.

Bibliotecas público – escolares: una apuesta de ciudad

Este espacio para ‘volar’ se hizo realidad en el marco del convenio 3917 de 2016 y tuvo un costo cercano a los 700 millones de pesos, que surgen de la alianza entre las secretarías de Educación y Cultura y la Fundación Amigos de las Bibliotecas.

Por esta razón, esta biblioteca cuenta con un modelo de gestión y administración colegiada entre las dos secretarías, que permite beneficiar a las diferentes poblaciones; además de una bibliotecaria escolar que se encarga de las actividades pedagógicas y un promotor de lectura y alfabetización digital para los habitantes de la localidad, miembro de la Red Distrital de Bibliotecas Públicas (Biblored).

Con la apertura de este espacio, Bogotá cuenta ahora con dos bibliotecas público – escolares en la ruralidad: la de Sumapaz y la de La Marichuela, ubicada en el colegio Miguel de Cervantes Saavedra de la localidad de Usme.

“Queremos hacer de los colegios oficiales nodos de cultura y desarrollo, puntos para el encuentro y el intercambio de saberes donde sector público, actores privados y comunidad se unen para beneficiar a los ciudadanos”, asegura la secretaria de Educación del Distrito, María Victoria Angulo, frente a esta apuesta del gobierno de Enrique Peñalosa.

Y ese es justamente el sentido del modelo de bibliotecas público – escolares que se están implementando en la ciudad en el marco del Plan Distrital de Lectura y Escritura ‘Leer es Volar’: que beneficien a estudiantes de los colegios y a las comunidades por igual.

En 2017, en el marco del Plan de Fortalecimiento de la Lectura y la Escritura de la Secretaría de Educación, el Distrito entregará 43 bibliotecas completamente nuevas a igual número de colegios, dotadas con más de 62 mil libros de la colección ‘Ciudad educadora’.

Además, 22 están en proceso integral de modernización en aspectos como infraestructura (mobiliario actualizado y equipo de lector óptico), materiales de lectura (colecciones), sistemas de información y seguridad.

Boletín de noticias
Registre su correo electrónico para recibir nuestras noticias.
Escrito por
Comunicador social y periodista.
No hay votos aun
Estadísticas: .
Diego Fernando Barragán Giraldo
Gran Maestro Premio Compartir 2004
Invitó a sus estudiantes a armar pieza por pieza un rompecabezas mental cuya imagen final dejaba ver la realidad del país.